Los estiramientos musculares son ejercicios diseñados para elongar y relajar los músculos, lo que puede ayudar a mejorar la flexibilidad, reducir la tensión muscular, y prevenir lesiones. Estos ejercicios implican estirar deliberadamente un músculo o grupo muscular específico hasta su punto de tensión cómoda, manteniendo la posición durante un período de tiempo para permitir que los músculos se relajen y se elonguen.

Los estiramientos musculares pueden ser estáticos, dinámicos o de facilitación neuromuscular propioceptiva (FNP), cada uno con sus propias técnicas y beneficios. Los estiramientos estáticos implican mantener una posición de estiramiento durante un período de tiempo, mientras que los estiramientos dinámicos implican movimientos controlados y repetitivos a través de un rango de movimiento. La FNP utiliza contracciones musculares isométricas para facilitar una mayor elongación muscular.

Los estiramientos musculares son comúnmente incorporados en programas de ejercicio y rehabilitación para mejorar la amplitud de movimiento, aliviar la rigidez muscular y promover una mejor postura. Es importante realizar estiramientos musculares de forma segura y adecuada para evitar lesiones, y es recomendable consultar con un profesional de la salud o un entrenador personal para obtener orientación específica sobre cómo incorporar los estiramientos en un programa de ejercicios.